PIAZZOLLA, FERRER Y EL TANGO PARA UNA CIUDAD Y PARA UNA GRAN ARTISTA
El Centro Cultural San Martín, abrió las puertas al tango que llega de la mano de Ana Fontán con su espectáculo Morir y vivir en Buenos Aires.
El hilo conductor es la historia de María que regresa para enfrentarse a quien fuera su primer amor e intentar curar viejas heridas. Pero la realidad será más cruel que el pasado. Ella deberá decidir si quiere vivir o si elegirá el final en su ciudad, en Buenos Aires.
Una cantante, una actriz
Ana Fontán interpreta a María con su ya conocida solvencia escénica y una sorprendente energía.
Canta, recita, actúa y se desplaza bosquejando coreografía pero sobre todo transmite emoción al espectador.
Acompañada musicalmente por Julián Vat en saxo y flauta, Damián Foretic en bandoneón y César García en piano, los cuatro logran que Astor Piazzola y Horacio Ferrer estén en escena, que desde la platea se los sienta y se los disfrute.
El lenguaje audiovisual enriquece el espectáculo con imágenes del pasado de la protagonista pero también con las de dos narradores omniscientes; uno que habla, interpretado por Pepe Cibrián Campoy y otro que canta, Rodolfo Valls que vuelve a demostrar que es uno de los mejores cantantes del musical argentino.
Morir y vivir en Buenos Aires tiene dos puntos alfa para la emoción del espectador, uno es cuando Ana Fontán ofrece una singular y pasional interpretación de Balada para un loco y cuando la invade el sentimiento al cantar Chiquilín de Bachín con las imágenes de fondo de Luis “Caito” Pfening.
El amplio espacio escénico fue resuelto por Ana Fontán y Laura Vega con una acertada puesta en escena.
Morir y vivir en Buenos Aires se ofrece los jueves y viernes a las 20,30 en la Sala Muiño del Centro Cultural San Martín de Buenos Aires.
CARLOS HERRERA
